Al agregar nombres al árbol genealógico se hacen múltiples consultas de fuentes confiables. El objetivo no es tener el árbol más grande del mundo, sino el árbol confiable que integre a la mayor cantidad de Nicaragüenses, viviendo en Nicaragua y en el exterior.

Entre las políticas que seguimos para agregar a alguien en el árbol están:

• Si se obtiene por búsqueda en el internet, debe provenir de una fuente confiable
• Si es brindada verbalmente por un amigo o familiar, deben recordar con alto grado de certeza el nombre
• Si dan una edad aproximada, solo se anota el año o se pone ABT (About) indicando que la fecha de nacimiento no es exacta
• Si es un extranjero que se casa con un Nicaragüense, solo se agregaran hasta sus padres, a menos que más miembros de la familia se hayan casado con nicaragüenses
• Si un Nicaragüense se casa con extranjero, se seguirá su descendencia hasta el final, aun cuando muchas generaciones hayan vivido en el extranjero y se casan con otros extranjeros.
• Cuando el apellido es muy similar a su forma acostumbrada, se anota de la forma acostumbrada a menos que tengamos certeza que la familia tiene la voluntad de mantener la nueva redacción, ya que muchos registradores cometían errores de ortografía, que posteriormente fueron corregidos en siguientes generaciones.
• Se respeta la voluntad de la madre al registrar a los hijos con solo el apellido de ella o los apellidos invertidos, primero el materno y después el paterno, si así sale en el registro público.
• Todo niño tiene derecho a padre y madre, por lo que anotamos los hijos fuera de matrimonio ligado a sus padres biológicos, aun cuando no exista matrimonio entre ambos. Esto lo hacemos si hay elementos de prueba que ambos son sus padres, ya sea por testimonio del padre, madre, hijos o el registro público.

Nuestra base de datos no es infalible, por lo que agradecemos cualquier corrección que nos ayuda a perfeccionarla.